Emir Kusturica se llevó la Palma de Oro en el Festival de Cannes en 1985
diez años antes que volviera a hacerse con la mención en su obra
maestra, la polémica"Underground". El director serbio, residente en
Estados Unidos elaboró en "Papá está en Viaje de Negocios" un retrato
costumbrista de una familia de Sarajevo a finales de los años cuarenta.
Viven bajo el marco político de la comunista Yugoslavia del
inconformista Tito, en ruptura con los dictámenes de Stalin. El pequeño
Malik y los suyos pagarán las consecuencias cuando el progenitor Mesa
(Miki Manojlovic, visto en "Irina Palm" y "Prométeme") es detenido la
misma noche en que Malik y su hermano Mirza son circuncidados por el
barbero del barrio acorde a la fe ortodoxa de los suyos. Mesa es llevado
al destierro por orden de su cuñado Zido al lejano Zvornik, a trabajar
en la minas. Mientras tanto Malik se entretiene a jugar a futbol y a
escuchar los partidos transmitidos en la radio de la indestructible
selección yugoslava en compañía de su amigo Serjoza (de hecho la
indiferencia del pueblo de Yugoslavia ante esos hechos políticos se
refleja con la imbatibilidad del equipo nacional en esta materia
deportiva).
La sinopsis puede parecer muy de "sui generis", cargado con sus tintes de drama, comedia de costumbres y sentimentalismo adyacente. Emir Kusturica apostó por un fresco divertido, folclórico (excelente banda sonora de Zoran Simjanovic), pícaro aunque algo cargado de amargura. Sin dejar de obviar un magistral sentido del humor que no dejaría nunca de lado en su posterior trayectoria como cineasta. Por una razón principal; la exposición infantil (la voz en off del narrador es la del pequeño Malik) expresa la inocencia frente a unos hechos que tienden a favorecer la sonrisa. Sin embargo, la diferencia se contraresta más en la posterior pieza de Kusturica, "El Tiempo de los Gitanos" en cuanto a disección de comedia y drama.
La sinopsis puede parecer muy de "sui generis", cargado con sus tintes de drama, comedia de costumbres y sentimentalismo adyacente. Emir Kusturica apostó por un fresco divertido, folclórico (excelente banda sonora de Zoran Simjanovic), pícaro aunque algo cargado de amargura. Sin dejar de obviar un magistral sentido del humor que no dejaría nunca de lado en su posterior trayectoria como cineasta. Por una razón principal; la exposición infantil (la voz en off del narrador es la del pequeño Malik) expresa la inocencia frente a unos hechos que tienden a favorecer la sonrisa. Sin embargo, la diferencia se contraresta más en la posterior pieza de Kusturica, "El Tiempo de los Gitanos" en cuanto a disección de comedia y drama.
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